lunes, 15 de octubre de 2007

Una lucha frecuente.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

A medida que trascurre la vida nos damos cuenta que la respuesta a esas preguntas pasan de ser literales para convertirse en respuestas que personifican nuestros pensamientos, deseos e interpretaciones de los mismos.
Que seria de la vida sin esos sencillos interrogantes…tan versátiles y cambiantes.

Alicia dijo...

Gracias, Vane por tus comentarios. Tienes razón, sin esos interrogantes no habría nada.

Anónimo dijo...

Yo no tengo este problema.
No soy inteligente de ninguna manera.