jueves, 20 de marzo de 2008

Miradas


Que no hablen
Que se queden mudas y cerradas
Protegiendo el secreto
de saberse tuyas y sin dueño
La prudencia callada
se parece a este verso en lo cobarde
Escoger el silencio
aceptar que no fuimos capaces
y apagar las luces...

1 comentario:

Gustavo Tisocco dijo...

Breve y enorme poema, un abrazo Gus.